miércoles, 26 de marzo de 2014

Explorando posibilidades



En las metáforas del aprendizaje, me doy cuenta de que he combinado por mucho tiempo la acumulación con la participación y aún no logro llegar plenamente a la creación de un nuevo conocimiento con los alumnos.  Me explico, mis asignaturas actuales son Etapas del Desarrollo Humano y Concepto de persona y personalidad, en ambas hay mucha teoría que manejar y es indispensable que el alumno la conozca primero para poder cuestionarla y crear algo nuevo, este proceso no es tan rápido como quisiera, se lleva su tiempo. Y, cuando hay que participar mediante actividades significativas, lo hacen con entusiasmo, hay mucho trabajo de observación en campo en Etapas del Desarrollo, lo que logra entusiasmarles cuando pueden vincular la teoría con observaciones concretas de la experiencia. En Concepto de Persona y personalidad, hay también mucha teoría, que se hace significativa cuando se deriva de ella, actividades que tienen que ver son su propia personalidad, esto lo hago de manera constante para ayudarles a aterrizar la información recibida, participan, se cuestionan y se entusiasman en la tarea. Ni se diga en las asignaturas de Teorías en Psicoanálisis y Psicopatología (que son las que más me apasionan, pero no las tengo este semestre) donde empiezan a abundar ejemplos de la propia experiencia y al ya tener un poco más de recorrido en la carrera, cuando ya estuvieron en escenarios de distintos proyectos, pueden hacer más significativo y situado el aprendizaje.

Sin embargo, una vez que acumulan la información, proceso también necesario en estas asignaturas que son parte de la columna vertebral de la carrera de psicología, logran participar en la aplicación práctica, para lo cual nos hace falta tiempo, antes de partir de ahí a la generación de nuevo conocimiento, que creo que, lo más que hemos logrado hacer es problematizar, crear nuevas hipótesis y abrir preguntas que se irán respondiendo conforme van avanzando, por ello creo que ahí me atoro o tal vez me falta tiempo para poder construir con ellos el conocimiento desde su propia perspectiva y a partir de lo ya sabido. Me parece que esto se da en espiral, hay que informarse antes de cuestionar, criticar, reformular y crear un conocimiento nuevo sobre lo ya conocido.

Entonces, he empezado por preguntar directamente a los alumnos. Solemos hacer en nuestra academia una evaluación “de medio camino” útil para nosotros los docentes, en el sentido de evaluar y modificar situaciones de aprendizaje con los alumnos. Así que modifiqué la evaluación tradicional e introduje diversos modos y herramientas de aprendizaje para investigar lo que les entusiasma a la hora de aprender. Me sorprendieron sus respuestas, la mayoría muy “tradicionales”, es decir, actividades que en general se procuran siempre: discusiones en grupo, exposiciones, análisis de películas, reportes de aplicación práctica y orientación presencial del docente.  

Uppss! Pensé que la innovación brotaría de sus jóvenes mentes y se les ocurrirían mil cosas… y no, solo un par de alumnas, de un total de 44 (ciertamente no es una muestra muy grande) hablaron de incremento de actividades semi presenciales o en línea, así como el uso de la tecnología para el aprendizaje en red, el resto de los alumnos contestaron cosas como que aprendían más en clase que en la red, que el uso del internet en clase les distraía, que la experiencia y asesoría del maestro les era importante y, creo que me apachurré un poco, esperaba una mayor conexión entre ellos a través de la red, cuando se los comenté me dijeron que eso era en la red social, como separando lo que hacen para socializar de lo que hacen para aprender, sin considerar que socializando también aprenden.

Creo que estas respuestas de los alumnos me retan y las propuestas y metáforas de aprendizaje me clarifican lo que hasta ahora he hecho, pero aún me pregunto lo que puedo hacer para avanzar en la construcción del conocimiento y las preguntas planteadas siguen abiertas:
  1. ¿Cómo podrías proponer actuaciones donde los alumnos vivan una experiencia de aprendizaje adecuada a lo que deseas?
  2. ¿Cómo sería un escenario donde se propicie la creación de contenido colectivo?
  3. ¿Qué elementos de diseño habría que colocar en tu propuesta para que el aprendizaje se hiciera aprovechando toda la riqueza de la red?
  4. ¿A quiénes habría que incluir (textos, vídeos, personas...) para que cada uno de nosotros dejemos de ser la referencia central del saber para nuestros alumnos?
Solo atino a ubicar un primer camino: centrarme creativamente en las tareas, favoreciendo las conexiones y aprovechando los contenidos existentes, para permitir que ellos hagan su parte: asimilar, cuestionar e innovar.

jueves, 20 de marzo de 2014

Internet, un “mar de posibilidades”



El agua, el mar, la frescura, son partes de la naturaleza que me atraen y me invitan a jugar con ellas utilizándolas como metáforas para expresar lo que voy descubriendo y en estos primeros intentos, serán mi marco de reflexión para establecer mi propuesta de situación de aprendizaje que quiero implementar en mis cursos de este semestre.

Entrar en internet es acercarse a un “mar” de posibilidades, por algo se llama “navegar”. Navegar en el mar es toda una aventura, navegar en internet también, hay que desarrollar habilidades para no perderse, para “dominar el timón” y saber a dónde dirigirse. Cuando se trata de aprendizaje, de igual forma es importante tener claro lo que se quiere aprender, a donde me va a conducir y qué voy a hacer con lo obtenido, esto es ya de por sí, una labor de concreción que requiere claridad, especificidad sobre el objeto de aprendizaje y aplicabilidad a situaciones concretas y resolución de problemas con los que los alumnos se enfrentarán en su práctica profesional.

Empiezo a “nadar” entre las propuestas que escucho en el video, entre las que leo en los blogs de mis compañeros y empiezan a surgir preguntas que posiblemente me ayuden a aterrizar lo que quiero realizar como propuesta de aprendizaje.

Viendo el video sobre las distintas propuestas me pregunto, ¿quiero que realicen algo centrado en las conexiones entre los alumnos?, ¿algo centrado en los contenidos o algo centrado en las tareas? Estas preguntas me ayudan a ir acotando una propuesta:

Me doy cuenta de que en este momento no quiero diseñar algo distinto respecto de los contenidos, con tan poco tiempo para concluir el semestre, implicaría revisar de nuevo y a fondo  la guía de aprendizaje y esto me gustaría hacerlo junto a mi academia, en las ricas discusiones sobre contenidos nuevos que pueden aportarse entre todos. Entonces, con los contenidos que tenemos establecidos, ¿cómo combinar las conexiones entre los alumnos y la modificación de las tareas de modo que resulten innovadoras para el aprendizaje, que incentiven la autogestión de los alumnos y su creatividad? Y en mi misma pregunta me doy cuenta de que me centro en las tareas innovadoras que estimulen el aprendizaje y que favorezcan las conexiones entre ellos. Las pistas empiezan a surgir.

Si, antes de surfear o de bucear, hay que aprender a nadar, al menos para no ahogarse. Nadar, surfear y bucear requieren de algunas habilidades comunes, como perderle el miedo al agua, flotar, trabajar con la respiración. Pero también el desarrollo de habilidades distintas dependiendo de lo que se quiere hacer.

En la actualidad “surfear” está de moda, desarrollar habilidades en el mar de posibilidades de la red, aprender miles de trucos para no “caerte”, herramientas diversas y velocidad en su manejo. Sin embargo, aun cuando está de moda, no todo el mundo lo consigue, me pregunto si esto busco que logren mis alumnos y me doy cuenta de que no es necesariamente lo que quiero incentivar en mi interacción con ellos. Creo que esto lo irán haciendo solos poco a poco.


En cambio sí me gustaría que aprendieran a bucear en un rincón concreto, admirando  sus maravillas, explorando sus posibilidades y disfrutando la aplicación de lo encontrado, no importa que sea solo en “ese rincón”. Me parece que es algo así como el video decía: aprender a discernir, a realizar distinciones precisas, a detenerse, a disfrutar una cosa a fondo, a asimilar todo su contenido y sacarle partido, y, además, realizarlo de muchas formas, dejar que se tornen creativos e innovadores en sus propios estilos y modos de aprendizaje, sí, creo que esto es lo que deseo hacer.

sábado, 15 de marzo de 2014

La Red, ¿un laberinto?


Marzo de 2014

El re-inicio

Aún me es difícil habitar la Red, abro una puerta, empiezo el camino, me topo con paredes varias veces y digo: "entonces por ahí no es" y me regreso, vuelvo a empezar y a ratos me siento en un laberinto, me doy cuenta que esto requiere paciencia, tiempo y pasión por la tecnología. Pero en este ir y venir, ya no fui la misma, aprendí un recorrido, una nueva herramienta y me quedé ahí, utilizándola un rato... Le doy un poco de cuerda a mi pasión y logro andar por el laberinto de la red otro rato más, utilizo mi PLE y veo cuán fácil puede ser todo, al mismo tiempo que veo desfilar tanta riqueza, tanta variedad, tanta utilidad que me sorprende, miro como es tan fácil para otros y descubro tantos recursos, tantas herramientas que esperan que me pare y las tome, las utilice y aproveche al máximo.

Y aquí estoy de nuevo, intentándolo otra vez, queriendo aprender más en esta nueva ruta del DARR, aunque descubro que no sé exactamente qué quiero, cuál es mi propuesta concreta, espero que la ruta pueda ayudarme a clarificar esto. Cuando pienso en lo que quiero que mis alumnos hagan, pienso en los grupos que tengo ahora y en ambos, quisiera que fueran más autogestivos y más creativos, que al reportar su aprendizaje fueran innovadores en las actividades para ello, en los contenidos y en las formas de presentarlo.

¿Cómo lograrlo? solo se me ocurre pensar en un modo suave, paulatino y motivante, ¿concretamente? no lo sé aún, habrá que pensar en las actividades, en los contenidos concretos y en los modos actuales, evaluarlos y modificarlos poco a poco, eso quiero intentar...